La revolución digital plantea nuevos retos éticos y morales sobre la propiedad intelectual (conjunto de derechos que regulan la protección de las creaciones del ser humano). Este es el tema que trata el primer documental que emite TVE con licencia Creative Commons, ¡Copiad, malditos!.
El documental relata paso a paso lo que debe hacer el director para poder ponerlo a disposición del público en la web y para descargarlo de forma gratuita y legal. Además también hace entrevistas a abogados y personas relacionadas con la propiedad intelectual.
En los pasos que debe seguir para lograr publicarlo se topa con la SGAE, entidad de gestión más grande de nuestro país, lo que la convierte en una de las protagonistas del documental. El mismo autor del documental comenta al principio del mismo que "la SGAE ha conseguido que se legisle a su antojo" y lo va argumentando a lo largo de este. Muchos ya ven a esta entidad de gestión como una empresa con puro afán recaudatorio, por lo que incluso algunas universidades se han negado a pagar.
Las mayores críticas que recibe la SGAE son las relativas a su agresiva política recaudatoria, su falta de democracia interna y la propia transparencia en el reparto. Pero, como se explica en el vídeo, para que la situación cambie, es la propia SGAE la que tiene que cambiar, flexibilizándose en favor de los consumidores y, sobre todo, de las nuevas tecnologías. El problema reside en que solo un 10% de la entidad tiene voz y voto para cambiarlo, y es este mismo porcentaje el que se beneficia de la situación. Entonces, ¿por qué iban a querer cambiarla?
En mi opinión esta situación seguirá siendo así hasta que los artistas quieran cambiarla. Ya hemos visto que la SGAE no va a cambiar sus formas de actuar porque esto le beneficia, entonces queda en mano de los autores de las obras que protege la entidad. Si no tienen a quien proteger, sus beneficios caería empicado y nos les quedaría más remedio que replantearse un cambio si quieren sobrevivir.
Por otro lado, esta claro que la industria de la música está cambiando con las nuevas tecnologías y ya son varios los grupos y artistas que solo se benefician de los conciertos. Esto no significa, ni mucho menos el fin de la música, sino la llegada de un nuevo modelo, como ocurre en todas las transiciones como la que esta sufriendo el sector.
Y vosotros, ¿qué opináis de la propiedad intelectual, la SGAE y el cambio que se esta produciendo? Espero vuestros comentarios.
Pongo a vuestra disposición el enlace del documental para que lo podáis ver completo.